Publicado:
2015-04-22Edição:
v. 1 n. 4-5 (2014): SCNK Revista de artes escénicasSeção:
ArtículosLos cuerpos detrás de la cortina rosada
Downloads
Resumo (es)
Este sabor a hierro en mi boca es inconfundible, esas “tetitas”… esas “tetitas”, son en definitiva la secularización de mis emociones… En la vernácula interpretación que hace mi mente de ellas, una epifanía nietzscheana que muestra los más puros instintos animalescos de mí… el arte de observar, fraguados instintos para algunos. ¡Observo!, ¡observo!, ¡observo! ¿Pregúntenme si me importa? ¡Claro que no hijo de…! Siempre las había imaginado así, son las tetitas de Andrea que aparecen detrás de la cortina rosada, aparecen ahora justo cuando la noche se hace más robusta, cuando el cielo se va impregnando de un púrpura recalcitrante que no se quiere ir a la más profunda oscuridad del infinito. Me hago dueño de ella, no vayan a creer que me refiero a la noche, no, no, claro que no, me refiero a Andrea.